A veces no lo comunicamos a los demás, pero siempre persiste en nuestro subconsciente la pregunta de ¿dónde andan los muertos? ¿Cómo es posible que hayan desaparecido tan de repente de nuestro entorno? Pero por otra parte parece que siguen ahí de otra manera, con una sutil presencia. Todo ello me ha inspirado este soneto:
by¿DÓNDE ANDAN LOS MUERTOS?
El que no vive existe diluido
en los valles que ando y en la rosa
que llena de perfume cada cosa,
pues casi del todo aún no se ha ido.
Decidme, muertos, ¿qué dulce latido
es el que siento en la piel porosa
y qué noche me invita misteriosa
a vivir en presente lo perdido?
¿Dónde andáis o por dónde me parece
que ando yo este sueño de quimera
que es sentiros sin veros ni palparos?
¿No será que un ahora me amanece
en el que sin el tiempo venga a amaros
para ser Uno en una primavera?
Pedro Miguel Lamet
Me encanta porque además ha fallecido este año una cuñada y una hermana de Comunidad, esta última de un cáncer tremendo y la siento mucho. Hoy precisamente hubiera cumplido 72 años. Murió estando yo en Cádiz.
Gracias a que tengo una familia estupenda. Estaba en casa de Amparo y hasta la perra lo notó. Me gustan mucho tus escritos y estoy en tu página web. Yo no tengo.
¡¡¡Que bien haber dado contigo porque ahora la voy a abrir con fecuencia. Maite
É muito lindo!
Morreu uma irmã minha quase de repente este mês
É isso que eu sinto
Querido Pedro, hemos pensado tanto en nuestra hija Viviana, que murió hace año y cuatro meses ya, con 28 años, y entre recuerdos hermosos de su esencia en el paso por nuestra vida…lei este soneto, tan hermoso, que me gustaria reproducir, si me lo permites. un grande abrazo Carmina y Mario desde México, en esta cuarentena en el mes de Mayo del 2020. Gracias, muy hermoso, con sensibilidad toca el alma.
Por supuesto, querida Carmina, junto a mi cariño y oración por Viviana, que goza de la luz de Dios.