Siempre hace buen tiempo

Category Archives: Dios

La araña del pensamiento

Respecto a las disquisiciones sobre inmanencia y trascendencia, el Uno y el múltiple, encuentro este poema de Rumi. Genial la imagen de la araña que teje con la saliva de los pensamientos. En cuanto se habla de Dios, lo estropeamos. Es como querer explicar un poema o diseccionar una flor

¡Oh, el que se compromete

con esto y aquello sin trascender el Ser!

¿Sin ponerte fuera del camino,

qué esperas hacer?

Deja de hacer una red, como una araña

con la saliva de tus pensamientos.

Es tan endeble, tan frágil.

Devuelve cualquier cosa que te haya dado el pensamiento.

Observa al Rey.

Busca Su favor, que se te ha dado

sin pensamiento.

Si no hablas, tu palabra será la de Él.

Si no tejes, Él te tejerá.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

Tomás, el encerrado, no se aclara

El encerrado Tomás no se lo cree. Los apóstoles estaban muertos de miedo. No se lo podían creer. Habían visto muchos latigazos, mucha sangre, mucho dolor y fracaso, la muerte de su líder, su mesías. Las apariciones eran confusas: lo veían los de Emaús y no se lo creían. La enamorada Magdalena entre lágrimas no lo reconocía. Pedro y los demás siguen atrancados. Tomás es como el ciudadano del siglo XXI: quiere constatación material, pruebas científicas, palpar, lógica de bolsa, bancos y multinacionales. Ha rechazado el mundo de lo invisible: solo son creencias, fantasías, elucubraciones. Rechaza el otro lado de la vida, ese “no sé qué queda balbuciendo” que solo algunos intuyen detrás de todo.

Ellos tienen miedo a los judíos, nosotros al coranavirus, por el que estamos encerrados. Este domingo –“el primer día de la semana”, dice la comunidad joánica- aparece Jesús de noche en medio de ellos. No entra por la puerta, surge en medio de ellos, en comunidad, que la primera lectura de los Hechos presenta como un ideal de estar juntos, de compartir.

Continue reading…→
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

Una ventana abierta al infinito

Llevamos dentro, sin saberlo, una ventana al infinito.

Durante el confinamiento de la pandemia muchos se quejan de que solo tienen una ventana o balcón abierto a la calle. Algunos ni siquiera eso. Sin embargo todo ser humano posee una ventana abierta al infinito.

“Eso es cosa de místicos”, he oído decir con frecuencia entre gente de Iglesia al hablar de esos temas, con un cierto tono despectivo o al menos inaccesible para un ciudadano de a pie.

Pues bien ha llegado la hora de que la mística, al menos en calderilla, esté al alcance de todos. De todos los que, claro, tengan algún interés de salirse de la dormición general que nos domina.
Uno de los temas que están alcazando cierto éxito entre la gente que busca algo de quietud es el del “espacio interior”. Eckarhart Tolle, que en mi opinión se sale de los tópicos libros de autoayuda. lo define así:

“La conciencia del espacio significa que, además de ser consciente de las cosas -lo cual siempre acaba reduciéndose a percepciones sensoriales, pensamientos y emociones-, hay por debajo una corriente de conciencia. Esta conciencia implica que no sólo somos conscientes de las cosas (objetos), sino que también somos conscientes de ser conscientes. Si puedes sentir un estado interior de quietud y alerta en el fondo mientras ocurren cosas en primer plano, ¡ya está! Esta dimensión está en todas la personas. Pero la mayoría no es consciente de ello. Yo a veces lo indico diciendo. “¿Puedes sentir tu propia Presencia?”

Continue reading…→
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

Predicar el silencio

San José María Rubio, SJ

Cierto predicador gozaba de unánime reconocimiento por su elocuencia, pero en la intimidad confesaba a sus amigos que sus brillantes discursos no producían ni de lejos el efecto que lograba un Maestro espiritual con sus sencillas sentencias.

Asi que se fue a convivir algunas semanas con aquel  Maestro.

-¿Has logrado conocer la razón de su eficacia? -le preguntaron sus amigos.

-Si, cuando él habla -respondió el predicador- sus palabras expresan el silencio. Las mías, en cambio, sólo expresan el pensamiento.

Continue reading…→
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

El monasterio mundial de la pandemia

En un contexto de enfermedad y muerte surgen dos aspectos liberadores: el silencio y el vacío

Empezamos a escuchar el silencio. Todo se ha detenido y el mundo ha entrado por obligación en un tremendo sigilo, donde vuelve a escucharse el sonido del viento, los pájaros, la lluvia, el mar, y sobre todo de uno mismo.

Se diría que el mundo se ha convertido en un enorme monasterio, obligado a unos ejercicios espirituales por real decreto.

San Juan de la Cruz llamaba a esta vivencia “la nada”, que en realidad para él era el todo

En palabras de un místico contemporáneo, Eckhart Tolle, “lo que aparece ante nosotros como espacio en nuestro universo percibido por medio de la mente y los sentidos es lo No Manifestado mismo, exteriorizado

Monasterio del desierto de Calanda

Estos días vivimos en un contexto de muerte. El continuo bombardeo de cifras nos estremece, muerde en nuestro subconsciente aumentando una sensación de miedo e inseguridad. Las noticias se interpretan desde una óptica materialista. Nos hemos rodeado de tales valores, que lo que importa es la apariencia, el poder, la juventud, el placer y el dinero, disfrutar de lo inmediato. No hay otra óptica ni otros intereses.

                Sin embargo tenemos otra manera de mirar detrás de esas noticias. Por ejemplo, dos aspectos son liberadores contemplados desde el despertar interior: el silencio y el vacío. Pueden verse en la ausencia de ruido de nuestras calles y la sensación de vacuidad en nuestro entorno. De pronto un mundo dominado por el ruido de los automóviles, la música estridente, los impactos de los medios y redes sociales, el martilleo de la publicidad, la obsesión por el consumo o  la sexualidad, viajes y artilugios, empezamos a escuchar el silencio. Todo se ha detenido y el mundo ha entrado por obligación en un tremendo sigilo, donde vuelve a escucharse el sonido del viento, los pájaros, la lluvia, el mar, y sobre todo de uno mismo.

Vacío_Existencial
El vació conduce al Todo

Se diría que el mundo se ha convertido en un enorme monasterio, obligado a unos ejercicios espirituales por real decreto. “Lenguaje sin palabras / y cánticos sin voz, / proclaman en la tierra, / proclaman en la altura, / la pequeñez del hombre, / la majestad de Dios” (José Selgas). Es cierto que tal stop a una sociedad vertiginosa puede convertirse en trauma para el que se rebela, pero es una bendición para quien conecta sin cavilaciones con el hondón del alma, donde palpita nuestro auténtico ser, el Dios de dentro.

Continue reading…→
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

Ver desde dentro

Ciega del Castell de Guadalest (Alicante) ©PMLamet

Bella escultura la de esta ciega que mira al cielo y está punto de caer. Es como una metáfora de muchas circunstancias de nuestra vida, porque, aunque tengamos del don de la vista,  con frecuencia nuestra mirada es incapaz de ver el camino que nos lleva a la Vida. Sobre esa ceguera y esa vida escribió Leopoldo Panero un hermoso y breve poema  titulado “Las manos ciegas”.

Ignorando mi vida, 
golpeado por la luz de las estrellas, 
como un ciego que extiende, 
al caminar, las manos en la sombra, 
todo yo, Cristo mío, 
todo mi corazón, sin mengua, entero, 
virginal y encendido, se reclina 
en la futura vida, como el árbol 
en la savia se apoya, que le nutre, 
y le enflora y verdea. 
Todo mi corazón, ascua de hombre, 
inútil sin Tu amor, sin Ti vacío, 
en la noche Te busca, 
le siento que Te busca, como un ciego, 
que extiende al caminar las manos llenas 
de anchura y de alegría.

Muchos miran y no ven. Porque con los ojos del alma es despertar, taladrar la apariencia, tocar la verdad desde dentro, donde poseemos sin saberlo la auténtica visión, una maravillosa centella de la Luz Total.

Pedro Miguel Lamet

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

El GPS de Dios

Iglesia de las Carboneras, Madrid. PML

Hoy reina en muchas personas la confusión y el miedo. Hay unos que materialmente buscan un camino para sobrevivir: los inmigrantes, refugiados, hambrientos. Otros, desde la soledad de un mundo hipercomunicado sienten la desorientación de la multiplicidad de mensajes y objetivos: el poder, el placer, el éxito, el dinero. Los medios y las redes sociales muestran caminos tentadores que, las más de las veces, acaban creando mayor frustración y vacío interior, si no son puras mentiras.
En los viajes por las carreteras y calles de nuestras ciudades es actualmente más fácil no perderse gracias al navegador por satélite, el GPS. ¿Por qué Dios no nos ha facilitado un GPS para encontrar el camino que nos realice, nos conduzca a la felicidad y llenumbre interior?
Si leyéramos con atención el Evangelio, lo encontraríamos:

Continue reading…→

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

La lluvia, retiro de la naturaleza

Lluvia  frente a la iglesia ‘Wieskirche’ b en Steingaden, (Alemania)

La lluvia lava el paisaje y lo difumina como pintándolo a carboncillo, y detrás de los cristales vaga nuestra melancolía en busca del sol perdido.

La lluvia es  el beso de Dios que fecunda la vida y hace florecer un futuro de primavera.  Invita al recogimiento.

Es  el silencio mojado de las cosas, el retiro que se impone a sí misma la naturaleza para gozar más del estallido de los colores. Un periodo más del ciclo que nos conduce de dentro a fuera, de fuera a dentro.              En los días de lluvia podemos escuchar la música del cielo acariciar la tierra o ‟cantar bajo la lluvia», sabiéndonos parte del mismo himno de amor.

También aprendemos a añorar el sol.

En los días de lluvia el mundo parece un jardín de monasterio y el corazón un huérfano solitario que sueña con la alegría. Esos días es como si el mundo entornara sus ojos para ver mejor entre la emoción de las lágrimas.

 Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

Levanto mis ojos

 

LEVANTO MIS OJOS

(Glosa al Salmo 120)

             

              Levanto mis ojos a los montes, por encima de los rascacielos, más allá de los satélites y las constelaciones, hacia los espacios siderales donde aún no ha llegado la mirada del hombre, al fondo inexplorado de los océanos y hasta el vacío quántico de la materia…

              ¿De dónde me vendrá el auxilio? ¿De las organizaciones políticas de los hombres? ¿La ONU, la UE, el FMI, las ONG, un nuevo orden internacional? ¿Del poder económico, la banca, las multinacionales y oligopolios? ¿De la asociación de vecinos, el club, mi equipo de fútbol?

              El auxilio me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra. De ti, solo de ti, que haces girar los planetas, habitas el cosmos, el fondo del mar, la sonrisa del  niño y la lágrima de la madre. Que alientas mi respirar y mantienes vivos desde un insecto y una flor a todo el Universo, que eres el misterio recóndito de cada cosa…

Continue reading…→

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

El arte de creer

 

 

Cuenta una vieja leyenda hindú que hubo un tiempo en que todos los hombres eran dio­ses, pero abusaron de su divinidad y el dios supremo Brahma decidió despojarlos de su ser y poder divinos y ocultarlos donde ningún hombre pudiera encontrarlos. Fue ardua la ta­rea de encontrar un buen escondite. Algunos dioses menores convocados a consejo para dar con el lugar adecuado para esconder la divini­dad del hombre propusieron ocultarla en lo más hondo de la tierra o arrojarla al fondo de los océanos; otros dijeron que lo más seguro sería elevarla por los aires a la más alta de las atmósferas.

Pero Brahma dijo que él sabía de qué pasta había hecho al hombre

Continue reading…→

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather