NOCHE INFINITA DE VERANO
Ahora que tibiamente en mi ventana
regresa con la noche del verano
el canto de los grillos y el temprano
susurro de una fuente tan cercana,
escucho desde el mar aquella nana
que acunaba mi sueño tan humano
de navegar contigo y de tu mano
al infinito sol de la mañana.
Han pasado los años y los días,
me he arrimado a este mundo pasajero
de ruido, poder y desconcierto,
y al besarme la noche del estío
descubro que no voy a ningún puerto
pues soy tu mar, tu sol y tu velero.Pedro Miguel Lamet