ORACIÓN DEL OTOÑO
Como el otoño, me deshojo esta tarde
con el viento que desnuda lentamente
el cercano jardín y arrastra mis pesares
hacia el cielo encapotado de lo inútil.
Se va quedando el árbol desprovisto
de aquellas coloridas ilusiones
con que antaño se poblaban las ramas
de versos pasajeros. ¿Te acuerdas?
¡Quería, necio de mi, conservar para siempre






